“El matrimonio es el estado ideal para los amantes del divorcio. Yo creo que llegará el día en que los regalos de boda se hagan contra reembolso. El matrimonio alcanza el equilibrio de pareja cuando sobre los cuerpos pasan los años y los antibióticos, y una noche, frente al televisor, ambos aceptan que lo más sólido en su relación es la bolsa de las patatas fritas”.